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Mostrando las entradas de 2017

Alguien.

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¿Has estado mirando la pantalla brillante  o escuchando música  durante tanto tiempo? Tratando de averiguar qué escribir de la nada. Es como obligar a tu cerebro a encontrar algo que valga la pena escribir. Obligar a tus dedos a tocar letras para componer palabras no deseadas de tu mente ociosa. Pero continúas escribiendo de todos modos. Y esta vez estás cavando profundamente en tu mente para pensar en algo bueno sobre lo que podrías escribir, Alguien. No hay nada mejor que escribir sobre alguien. Alguien de quien quieres que la gente conozca, básicamente alguien con quien puedas conectarte. Alguien que realmente conozcas. Podrías escribir tantas cosas sobre ello. Podrías contarles lo buenos que son, lo ingeniosos que son, lo que hacen, lo que les gusta, lo que sienten hacia ellos y lo que sienten hacia ti.  Las cosas de las que se ríen, la comida que les encanta comer, los libros que les encanta leer, los juegos que les...

Algo va a cambiar.

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"Simplemente no lo sé”, dijo ella, estaba confundida sobre lo que sucede entre ellos dos. Han pasado 134 días desde que se fue. 134 días y aun así ella todavía se está agarrando.  Ella se mantuvo esperanzada. Esperaba que algún día volviera. Sin embargo, no dio ninguna seguridad al volver; Fue solo su fe en él lo que la hizo pensar que él podría volver "algún día". A pesar del hecho de que ya no hablan y se ven mucho menos, sabe que su amor por el todavía está vivo. Y esa es principalmente la razón por la que ella todavía no lo está soltando. Ella se niega a dejar que su amor se desperdicie, por lo que no dejó de amarlo... Aunque ella pudo haber dejado de mostrarlo. Han pasado 134 días y, sin embargo, siempre se encuentra pensando en él. Constantemente se pregunta qué sentiría estar envuelto en sus brazos y cómo sonaría oírle decir que la ama. Lo que sea que haga, donde quiera que vaya y cuando sea; la idea de él nunca dejó de pensar. Nunca incluso cuando ...

A mi mejor amigo… quien comenzó a alejarse.

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Principalmente, me gustaría que supieras que has sido un muy buen y excepcional amigo; No estaría escribiendo esta carta en primer lugar si no lo estuvieras. Y te agradezco por todas las cosas que me has hecho y por mí; por estar en cada momento que te necesite y cuando no también, cuando fue un día de flojera y la pasamos juntos sin hacer nada o cuando fue un día donde reímos sin parar – y hasta llorar -, simplemente por ser un verdadero amigo, desde el primer día hasta ahora.  Siempre admiré nuestro vínculo a través de los años; pero enfrentemos el hecho de que las personas cambian con el tiempo, también lo hacen las relaciones. Nuestras relaciones con algunas personas cambian, nos guste o no, es inevitable... ¿creo? Y en este momento, le escribo esta carta en vista del hecho de que nuestra amistad usada para ser la más maravillosa y realmente genial  del mundo comenzó a desaparecer. Solíamos estar muy cerca el uno del otro; ...

No pasa nada hasta que algo se mueve.

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El tiempo pasa.. Y todos estamos envejeciendo, y con eso, me refiero a que estamos (más) maduros a medida que pasa el tiempo. (¡Lo espero para algunos!) Y al ser maduros, estamos comenzando a comprender las cosas profundamente; tratamos de lidiar con cosas de una manera más sensata. Mejoramos en el manejo de las cosas porque aprendemos de las experiencias; Lo usamos como un instrumento para que podamos cambiar para mejor. Envejecer es difícil; Adaptarse al cambio es más difícil. Esas cosas son inevitables, lo que significa que siempre debemos estar acostumbrados a los cambios, porque eso es lo único constante en este mundo. ¿Por qué las cosas no pueden volver a ser cómo eran? Porque a medida que el tiempo cambia, las personas cambian, nuestras perspectivas cambian y el mundo cambia con ellas. Sin el cambio, los humanos no comprenderán el verdadero significado del valor. Nada es permanente en este mundo, eso es un hecho. Tenemos que aceptar que algunas cosas y personas no están des...

¿Quieres tú?

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Quisiera tomarte de la mano y perderme contigo en un bosque inventado, donde no exista el tiempo, donde la luna cómplice nos regale su brillo mientras se peina frente al espejo de un lago oscuro y profundo como tus ojos. Perderme contigo en la noche sin temor de que aparezca el lobo feroz o una bruja malvada a romper el hechizo. Quisiera perderme contigo en una noche sin pensar qué será de ti o de mi mañana, disfrutando cada instante, sin importar riesgos ni consecuencias, sin que el universo importe. Poder escaparme contigo de la realidad y mirarla de lejos, porque tienes la virtud de hacerme olvidar de las preocupaciones y hacerme ver los problemas pequeñitos como cucarachas. Quisiera compartir contigo cada una de mis noches, de mis lunas llenas. Cada uno de mis días y cada una de mis lágrimas; cada risa, cada suspiro y las maripositas en el estómago que desde el instante en que nuestros labios se fundieron en un beso no han dejado de revolotear. Quiero compartir contigo mi vida,...

Almas gemelas.

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Cuando te miré supe instantáneamente que tú estabas para mí y yo para ti, supe que éramos almas gemelas y que tu alma y la mía se completaban como una pieza de rompecabezas.  Lo supe porque en tu mirada vi todo lo que buscaba, porque mirando tus ojos me perdía en un bosque que me brindaba tranquilidad y plenitud absoluta. Porque lo supe en el momento que me di cuenta que eras mi cómplice de sonrisas, cómplice de miradas, cómplice de locuras. Yo, frío como un temprano de hielo, tu, divertida y sincera. Soy el frio y tú el calor. Almas gemelas distintas de la una con la otra, pero con una fuerza que siempre los junta. El amor, la fuerza más bonita que nos unió. Un amor más fuerte que un huracán, porque ellos siempre juntos quieren estar, más dulce que un chocolate recién hecho. También supe que nos habíamos encontrado en otra vida y que en ese tiempo pasado nos amamos profundamente hasta morir, que desde ese entonces quisimos estar unidos eternamente, que tu alma y la ...

Cinco años.

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Aquella casa situada casi en la esquina. Las verjas rojas, las paredes blancas; busca parecerse a una fortaleza, de donde surge ella, mi abuela materna, tomaba café sin parar y era la mejor cocinera del mundo, con mirada curiosa; hasta que reconoce al visitante y le sonríe con euforia, por fin abre hacia la derecha, mientras ella aguarda, espera un saludo, la bendición, un abrazo y siempre con sus dulces palabras: "que bueno que viniste". tengo tatuada en mi retina la sonrisa al verme llegar a su casa y estoy segura que nunca nadie me ha querido tan incondicionalmente.  Debe caminarse, entonces, a través de la cochera, bajar las escaleras e ingresar a la casa y sentarse en uno de los sillones negros estampados con rojo, amarillo y otros colores. Muchas otras veces caminar hasta el mesón que separaba la sala de su gran cocina, en la cual yacían una respectiva taza de café con leche para cada visitante y una gran cesta llena de pan para acompañar y como siempre decía antes de ...

Bienvenidos.

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¡Hola! Bienvenida a mi espacio, es un placer tenerte por aquí.  Mi nombre es Stephany, soy venezolana y en este lugar trato de encontrar el equilibrio perfecto entre ser estudiante de Psicología -y ex recursos humanos- y mi hobbie que es escribir.  Estoy feliz de que nos encontramos, probablemente significa que compartimos algunas pasiones frescas. Esta es una pequeña introducción a mí misma. Aparte de lo que normalmente hace una estudiante de Psicología, que es volverse loca entre tantas teorías pero siendo totalmente feliz porque es la carrera que siempre soñé, mi terapia de relajación favorita es cocinar. Amo el chocolate y todo lo que tenga que ver con pastelería y repostería, amo el olor que sale del horno cuando preparo algo y la cara de felicidad de mi familia cuando les gusta lo que prepare, aunque este en una etapa de mi vida en que todo sea ensayo y error, y no en este caso no hablo solo de la comida, sino de todo en general, les confieso que estoy apre...